Dominio Romano

Bajo el dominio romano, la historia judía experimentó una serie de eventos significativos y desafiantes.

1. Contacto Inicial:
   • El primer contacto directo entre Roma y Judea ocurrió en el siglo I a.C. debido a la intervención romana en las disputas por la sucesión al trono de Judea.
   • Aunque oficialmente seguía siendo un reino independiente, Judea estaba bajo la influencia de Roma, con reyes como Herodes el Grande como clientes de los romanos.
2. Relaciones Tensas:
   • La presencia romana en Judea era visible a través de legiones y un prefecto que controlaba las acciones del rey local.
   • Sin embargo, la cultura judía, especialmente en el terreno religioso, difería significativamente de la romana.
   • Los judíos veían a los romanos como idólatras y consideraban a sus líderes colaboracionistas.
3. Transformación en Provincia Romana:
   • En el año 4 d.C., el emperador Augusto decidió convertir Judea en una provincia romana con la esperanza de romanizarla.
   • Sin embargo, la resistencia judía demostró ser feroz, y la brecha cultural y religiosa persistió.
4. Emperadores y Conflictos:
   • Tiberio, Calígula y Claudio gobernaron durante este período y enfrentaron desafíos en Judea.
   • Nerón fue especialmente inflexible y desencadenó una serie de conflictos.
5. Gran Revuelta Judía (66-73 d.C.):
   • La Gran Revuelta fue una lucha desesperada por la independencia judía contra el dominio romano.
   • El Templo de Jerusalén fue destruido en el año 70 d.C. por las legiones romanas bajo el mando de Tito.
6. Consecuencias:
   • Refundación de Jerusalén: Tito refundó Jerusalén como ciudad romana llamada Aelia Capitolina y prohibió a los judíos entrar en ella.
   • Provincia Romana: Judea se fusionó con Siria para formar la provincia de Siria Palestina.
   • Restricciones Religiosas: Se limitaron las libertades religiosas de los judíos, incluida la enseñanza de la Torá.